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Así estamos
Al Presupuesto General del Estado no ingresan petrodólares. En teoría solo por la caída del precio del crudo, pero no es así. Veamos cómo se forman los ingresos petroleros. Por el lado de la producción pública el fisco recibe una regalía del 18,5%, y del saldo restante, el monto por las exportaciones directas de petróleo una vez satisfecha la demanda interna. Por el lado de la producción privada, el Gobierno recibe un margen de soberanía del 25%, y del otro 75% se queda con el saldo disponible luego de pagar todos los costos y tarifas de producción y transporte.
En el 2015 se presupuestaron $3.043 millones de ingresos petroleros pero solo se registraron $349 millones. Según las cifras oficiales, este monto provino del margen de soberanía privado, y todo lo demás fue cero. ¿Acaso no hubo producción pública de crudo? El meollo del asunto son las preventas petroleras. Estamos más petrodependientes que nunca.
Las soluciones
El negocio petrolero ecuatoriano necesita ser replanteado para que provea y no quite recursos a la economía, necesita inversión privada. Contra toda lógica, la producción petrolera ecuatoriana estuvo prácticamente congelada durante la época en la que el precio del crudo se duplicó y alcanzó máximos históricos. En 2015 Ecuador produjo en promedio 543.000 barriles de crudo por día, solo un poco más de los 536.000 producidos en el 2006. En otras partes, como en Colombia, duplicaron la extracción petrolera gracias a sus modelos de negocio amigables con la inversión privada. Allá también les afecta la caída del precio de petróleo, pero pueden venderlo porque no deben a empresas privadas ni tienen comprometida su producción.
Hay que abandonar las preventas petroleras. Sí, el Presupuesto ya no recibe petrodólares, pero porque ya los recibió antes. Por eso el año pasado las cuentas fiscales registraron $0 en ingresos por regalías y exportaciones directas de petróleo pero más de $2.400 millones en petróleo entregado por ventas anticipadas. Sin mencionar que también pidió adelantado $1.835 millones de este y los próximos años. Es decir que más allá del bajo precio, el Gobierno no recibe ingresos petroleros porque ya no vende petróleo al estar comprometido por la preventa.
Necesitamos abandonar la petrodependencia para una verdadera transformación productiva en libertad. La caída del precio del crudo ha evidenciado que Ecuador depende mucho más de los recursos generados por el petróleo. Ante esto la respuesta es más libertad, con un ambiente amigable para el emprendimiento y la iniciativa privada. De hecho, según el FMI una de las razones más fuertes de la crisis económica es el fuerte retroceso de la inversión privada en relación al PIB entre 2011 y 2015. En especial en Argentina (-2,4%), Brasil (-2,5%), Ecuador (-2%) y Venezuela (-3%), países que tienen en común un modelo de desarrollo con gran intervención del Estado y mayores restricciones a la libertad.
Para salir de la crisis y encaminar la economía hacia la senda del crecimiento económico hay que deshacerse del dirigismo económico y del aislamiento comercial. Hay que liberar el espíritu emprendedor de los ecuatorianos.
Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en esta dirección.
